Resfriados

Los resfriados no son causados por gérmenes, sino por acumulaciones de mucosidad tóxica en los conductos nasales, lo que impide que el flujo de mocos limpios realice su función depurativa habitual. En estas condiciones, los gérmenes atacan los desechos tóxicos, generando más mucosidad e inflamando los senos y conductos nasales. La mejor cura para un resfriado importante consiste en un ayuno terapéutico de 3 días, acompañado de irrigaciones colónicas dos veces al día, seguido de una terapia nutricional para evitar recaídas.

Rábano picante y zumo de limón:

Los potentes efluvios del rábano picante recién rallado disuelven rápidamente las mucosidades de los bronquios y los senos nasales. Su combinación con zumo de limón fresco potencia aún más su eficacia. Llene un tazón con rábano picante rallado, añada suficiente zumo de limón fresco para formar una pasta y consúmalo en ½ cucharadita, 2-3 veces al día, según se necesite.

Zumo de limón:

Exprima el zumo de uno o dos limones y mézclelo con un vaso de agua destilada tibia. Bébalo lentamente, 2-3 veces al día. Esto ayudará a disolver y eliminar el exceso de mucosidad en todo el organismo, evitando que sea excretada por las membranas pulmonares y nasales.

Puré de limón entero:

Pase un limón entero (con piel, fibras y semillas) por la batidora junto con una taza de agua destilada, y consúmalo lentamente. Si lo desea, puede aromatizarlo con 1 cucharadita de melaza, pero evite el azúcar. Este puré disuelve las mucosidades y restaura las membranas mucosas. Los bioflavonoides de la piel y las fibras de limón contribuyen a restaurar la integridad de los tejidos del aparato respiratorio.

Otros alimentos beneficiosos:

Zumo de zanahoria, rábanos crudos, arándanos (como en el asma), espinacas crudas, ajo crudo, melaza.

Alimentos a evitar:

Leche y productos lácteos pasteurizados, todos los alimentos cocidos, féculas y azúcares refinados. Consuma únicamente fruta cruda y zumos de vegetales crudos.